Descripción
La berenjena es una planta de fruto comestible, generalmente anual, dentro de la familia de las solanáceas.
El fruto, comestible, es una baya de 5 hasta 30 cm de longitud de forma cilíndrica, oblonga o alargada en la mayoría de los casos, con una piel lisa, brillante y de colores diversos según la variedad. La más común es la de color morado o negro al madurar.
La pulpa es consistente, de textura esponjosa, de color blanco, tiene cierto sabor amargo y presenta pequeñas semillas de color amarillo.
Se encuentra todo el año al ser cultivado en época de bajas temperatura en invernadero.
La berenjena se caracteriza por el color morado de su piel, aunque la tonalidad y la trama puede variar, ya que existen también berenjenas que mezclan morado con otros colores como el blanco, mientras que otras serán de un color morado tan oscuro que parecerán negras. Este color exterior contrasta con el interior de la berenjena, ya que la carne de esta verdura es blanca con pequeñas semillas en su interior. En cambio, la forma de la berenjena será más variable entre redonda y ovalada.
Según la forma del fruto, existen las siguientes variedades:
Fruto largo: Larga negra – Larga morada – Violeta de Barbentane – Croisette;
Fruto redondo: Violeta de Nueva York – De Almagro
Fruto ovoideo: Jaspeada de Gandía – Mission Bell – Belleza negra – Blacknite – Bonica – Florida Market.
Las berenjenas son verduras muy populares en las dietas debido a sus propiedades laxantes gracias a la gran cantidad de agua que posee, así como por su reducida cantidad de calorías. Es conocida, no solo por su ayuda para bajar de peso, sino también por ser un ingrediente fundamental en muchas gastronomías del mundo.
En general con todas sus variedades, podemos cocinar igual, aunque la mayor diferencia es que las berenjenas largas, chinas y japonesas, tienden a amargar menos.
Las berenjenas son muy versátiles en la cocina. Son muy ligeras para su tamaño porque su interior es esponjoso, lleno de aire.
A la hora de elegir la berenjena, opte por aquellas que resulten mas pesadas para su tamaño y que tengan la piel brillante y tersa, sin arrugas, que no estén demasiado duras. Si la berenjena está blanda, indica que está demasiado madura y su sabor será más amargo.
Evite coger las berenjenas que tengan algún tipo de rozadura, corte o golpe y elige aquellas que tengan la piel lisa, sean de tamaño pequeño y tengan un color morado oscuro.
La mejor forma de conservarlas sería en la nevera, en el cajón de las verduras. Pueden ponerse marrones y blandas rápidamente, si se conservan a menos de 10ºC, o a más de 22ºC, por lo que se recomienda, guardarlas durante poco tiempo y consumirlas lo antes posible.
